Friday, October 6, 2017

¡Viva Duranguito!



“El gran riesgo del mundo actual, con su múltiple y abrumadora oferta de consumo, es una tristeza individualista que brota del corazón cómodo y avaro, de la búsqueda enfermiza de placeres superficiales, de la conciencia aislada. Cuando la vida interior se clausura en los propios intereses, ya no hay espacio para los demás, ya no entran los pobres, ya no se escucha la voz de Dios, ya no se goza la dulce alegría de su amor, ya no palpita el entusiasmo por hacer el bien.” – 2. Evangelii Gaudium


El mundo en el que vivimos, nos ha vendido la idea de que el Capitalismo es el único camino a seguir y que entre más dinero tengas, más vale tu persona. Esto es un reflejo de lo que se vive en El Paso, Texas. Aquí el barrio de Duranguito está siendo derrumbado porque los visionarios del progreso en la ciudad, quieren construir una arena en su lugar. Han desplazado a la gente de sus casas, han intentado derrumbar los edificios sin permiso de la corte, y han sobornado a los residentes para dejar sus hogares. 


Yo he seguido de cerca el caso del barrio de Duranguito. También he tenido la oportunidad de estar presente en algunos de sus eventos, y he llegado a conocer a gente maravillosa. He participado en caminatas por el barrio, he rezado el rosario con sus miembros alrededor de todo el vecindario, y a menudo, paso por allí cuando uso el autobús de la ciudad.



La gente de Duranguito es increíble. Son personas llenas de vida y valor. Son personas de esperanza y amor. Muchos de ellos han estado viviendo allí por décadas. Han crecido allí; han luchado para hacer de su barrio un mejor lugar. Han luchado para hacer de su barrio, un barrio sin crimen, drogas o violencia. Ha tomado mucho tiempo, pero poco a poco lo han ido logrando. Doña Toñita, una señora adulta y residente del barrio Duranguito ha estado viviendo allí toda su vida. Esa es su casa. Ese es el lugar en el que creció. Es el lugar donde guarda sus más profundos y preciosos recuerdos.
Es injusto pensar en el progreso de nuestra ciudad haciendo daño a otros.



Especialmente aquellos que son más vulnerables. La gente de Duranguito no está en contra de la arena o el progreso de la ciudad, sino que están en contra de la destrucción y demolición de sus hogares. Yo, como ellos, apoyo la construcción de la arena, pero no en lugar del barrio de Duranguito. Apoyo la arena, pero en un lugar donde no se destruya ningún barrio o historia cultural. Trabajemos juntos para hacer de El Paso una ciudad mejor de la que es ahora, pero sin excluir a nadie ...

Luchemos en contra de la opresión, la desigualdad, la exclusión, la marginación, el racismo, el capitalismo, y los deseos enfermizos de placeres superficiales.



¡Viva Duranguito! ¡Viva el pueblo!